El asesor internacional de varios países africanos asegura que la UE debe facilitar ayudas económicas para el desarrollo y seguridad de África
Sociedad
11 sep. 2020

Mohamed Jamil Derbah afirma que la oleada de pateras se debe a “un problema de fronteras, de pobreza y de mejora del nivel de vida”

Mohamed Jamil Derbah, asesor internacional de varios países africanos, asegura que “miles de inmigrantes irregulares, principalmente subsaharianos, argelinos y marroquíes, llegan a las fronteras exteriores de la Unión Europea y muchas personas arriban a las costas españolas y, en este caso, las canarias.

Derbah indicó que “la gran mayoría trataron de entrar en el país saltando las vallas fronterizas o embarcados en pateras aunque su desesperación por sobrevivir los empujaba a navegar hasta en balsas de juguete o simples flotadores. Con este panorama, que se repite día tras día, tanto los países miembros de la Unión Europea como los gobiernos africanos deben hacer frente a un drama cuya solución más efectiva radica en la cooperación internacional y la inversión en los países afectados por esta situación de extrema pobreza, evitando así  la emigración masiva de sus habitantes”.

Mohamed Jamil Derbah considera que “estamos ante un problema de fronteras, de pobreza y de mejora del nivel de vida”, en definitiva, “de que nadie tenga que irse de su país porque no le quede otra alternativa para sobrevivir”.

Afirma que “las tragedias de naufragios de inmigrantes en el mar Mediterráneo como las sucedidas en la isla de Lampedusa o la insostenible presión migratoria en las fronteras del sur de la UE, concretamente en Canarias,  dejan claro que el tráfico humano es “la forma moderna de esclavitud”, y por ello existe “una necesidad urgente de perseguir a sus responsables y desmantelar esas redes de extorsión, que representan otro de los grandes conflictos que, junto a las guerras y a la pobreza, asolan el continente vecino. Por ello es necesario un serio esfuerzo y compromiso africano para combatir mafias, terrorismo y crimen organizado y promover así un desarrollo sostenible”.

Derbah precisó que “a la hora de abordar las causas de la inmigración en su raíz, es necesario, además, encontrar alternativas que promuevan oportunidades de empleo para los jóvenes africanos a nivel regional así como organizar con mayor eficacia la inmigración legal en Europa, facilitando también la inmigración laboral”.

Ayuda de la Unión Europea 

A cambio de que los países africanos lleven a cabo los compromisos pactados con Europa, la UE debe facilitar ayudas económicas para el desarrollo y seguridad de África, Derbah insistió en que “dichos países deben mantener su compromiso de erradicar las armas y cree en la necesidad de responder de manera conjunta a esos ‘retos comunes’ como el desempleo, la salud, el cambio climático y la seguridad energética así como luchar contra el crimen organizado y el terrorismo. Para Derbah, las relaciones bilaterales entre ambas potencias se basan en “retos y un futuro comunes como ciudadanos de un mismo mundo”. 

Inversiones productivas 

Mohamed Jamil Derbah aseveró que “uno de los puntos más importantes a tener en cuenta respecto al continente vecino es su crecimiento económico. Muchos países africanos están experimentado un desarrollo muy interesante para empresas internacionales que ven una buena oportunidad de inversión en aquellas tierras. Precisamente lo que necesita África son inversiones productivas que dinamicen su economía. Además de los proyectos para construir infraestructuras necesarias como las carreteras, hay que tener en cuenta la importancia de instalar actividades económicas alrededor. Si no se tiene en cuenta este factor, los cientos de millones de jóvenes entre 15 y 30 años que no están escolarizados ni tienen trabajo, caerán desesperadamente en la trampa de sus antepasados, empeñando lo poco que tienen para embarcar en una patera que les lleve a un inexistente paraíso”.

Derbah concluyó que “la hoja de ruta de la diplomacia y de los gobernantes está marcada, ahora hay que actuar y materializar todos esos desafíos para que no se queden sólo en buenas intenciones sino en un esfuerzo común entre ambos continentes, entre Europa y África”.